domingo, 20 de enero de 2008

PERSÉPOLIS



“Vivir en paz es un privilegio de una parte del mundo”



He acabado por fin de leer la novela gráfica Persépolis (“la ciudad persa”) de Marjane Satrapi y me ha fascinado aún más que la película. Como sabéis, la historia refleja la juventud y la adolescencia de Marjane Satrapi, una iraní que vivió en la época de constante guerra y transformación en su propio país natal.

En su constante búsqueda de la libertad, en la cual se incluya la libertad de expresión, de vestimenta, de opinión y de vida, los padres de Marjane se vieron obligados a sacar a su propia hija fuera del país con tan sólo 14 años. Estuvo durante varios años en Viena, en una ciudad en la cual no entendía ni el idioma ni tampoco la conducta de sus habitantes. De todos modos, eso sí, estuvo libre de la presión de las autoridades islámicas iranís.

Con el paso del tiempo, Marjane nota, que no encontraba la libertad que tanto ansiaba. Se trasladó a Viena para salir de las miserias de la guerra pero no se sentía cómoda ni aceptada con lo cual le llevó incluso a negar su propia identidad para poder integrarse mejor en la sociedad. Se vio sumergida a una generación de niños y adolescentes que no habían vivido jamás una guerra, de estar obligados a llevar un velo, de esconderse en el sótano cuando caían las bombas, de no haber visto jamás morir a una persona querida. Poco a poco pero se integra a la sociedad “occidental” y empieza a tener una adolescencia normal, sus primeros amigos, su primer amor y su primer desamor: “había sobrevivido a una guerra que me había alejado de mi país y de mis padres y una banal historia de amor había estado a punto de acabar conmigo.

A veces olvidamos que hay personas que lo pasan aún peor que nosotros y yo mismo me incluyo en “nosotros.” Yo, que nací en septiembre de 1979, justo en el mes de la revolución de Irán. Yo, que tuve la suerte de estar con mis padres, que tuve la suerte de gozar de mi libertad de expresión, de mi propia forma de vestirme, de no esconderme de mi misma mientras que Marjane (a mi edad) vio morir a sus mejores amigos en la guerra, vio como todos los hijos de familias se vieron obligados a ir al frente con la promesa de que su muerte le abriese las puertas del paraíso (les daban una llave como garantía de que si muriesen como mártires entrarían en el paraíso y tendrían comida, fama, dinero y mujeres).

En fin, generación de la post-modernidad, la libertad es un lujo que no sabemos apreciar aún. La libertad es un sentimiento de liberación que pocas personas saben valorar. La libertad es un privilegio para solo una parte del mundo.




La escena que más me ha conmovido personalmente fue con la abuela de Marjane antes de su salida de Irán:

"En la vida te encontrarás a muchos gilipollas, si te hacen daño piensa que es su estupidez lo que les impulsa a hacerte daño, así no responderás a su maldad, porque no hay nada peor en el mundo que la amargura y la venganza. Se siempre digna e íntegra contigo misma.

Pues no olvides esto: el miedo nos hace perder la conciencia y también nos convierte en cobardes. Has sido muy valiente, estoy orgullosa de ti."





No hay comentarios: